Preguntas Frecuentes
Nuestra historia inicia en 1947 con el evangelista estadounidense, Bob Pierce, quien viajaba por China y dio los últimos $5 que tenía en su bolsillo para ayudar al cuidado de una niña china abandonada que le fue presentada por un misionero chino. Poco después, China quedó cerrada para los occidentales, y Pierce fue a Corea como corresponsal de guerra. Allí, él y el prominente pastor Dr. Kyung-Chik Han establecieron una iglesia en el país con el fin de atender a las viudas y huérfanos afectados por la guerra y para apoyar la labor misionera en la región con fondos de iglesias estadounidenses.
Lo que inició con la ayuda a una pequeña niña se ha convertido, con el apoyo de Dios, en una de las organizaciones humanitarias con mayor presencia en el mundo: World Vision International.
En Guatemala estamos presentes desde 1975, cubriendo comunidades vulnerables a nivel nacional, promoviendo relaciones de solidaridad y transformación humana, beneficiando a miles de niñas, niños, familias y comunidades.
Los proyectos de World Vision pueden agruparse en tres grandes áreas:
- Desarrollo comunitario sostenible a largo plazo, centrado en ayudar a las comunidades a satisfacer las necesidades legítimas que sus miembros identifican, como agua potable, educación, atención sanitaria, mejoras agrícolas y saneamiento.
- Trabajar con los responsables políticos y el público a nivel nacional y regional para concienciar sobre la pobreza y abordar los sistemas injustos que contribuyen a perpetuarla.
- Atención a Emergencias a corto plazo, como el suministro de alimentos, refugio y atención médica a los supervivientes de catástrofes naturales o provocadas por el hombre
A través de programas en:
- Educación y Reducción del Riesgo a Desastres
- Prevención de la Violencia
- Seguridad Alimentaria y Nutricional
- Patrocinio y Compromiso Comunitario -CESP-
El apadrinamiento de niños es una forma eficaz y satisfactoria de ayudar a dar a una niña o niño de una comunidad vulnerable la oportunidad de un futuro mejor.
Para prosperar, la niñez necesita crecer en un entorno que les proporcione lo esencial que necesitan hoy, junto con la esperanza y las oportunidades del mañana. Los niños necesitan gozar de buena salud y ser cuidados y protegidos. Necesitan ser educados para la vida, ser acogidos para participar en las decisiones que afectan a sus vidas y ser libres para elegir amar a Dios y al prójimo. Las contribuciones de los padrinos financian un trabajo de desarrollo vital en la comunidad de su niño apadrinado, que con el tiempo se traduce en una mejora significativa del bienestar de los niños.
World Vision trabaja con grupos de la comunidad y con los propios niños para planificar y llevar a cabo los cambios necesarios para que más niños tengan la oportunidad de desarrollar su potencial en la vida. Los padrinos son testigos de estos cambios a través de los informes de progreso de la comunidad y de la comunicación personal con sus niños apadrinados. Los padrinos pueden animar al niño que apadrinan escribiéndole o incluso visitándole a él y a su familia.
Al combinar las donaciones de muchos padrinos en la zona de un proyecto, World Vision trabaja con una gran comunidad durante un período prolongado, normalmente de 15 años. Esto ayuda a conseguir objetivos de desarrollo legítimos elegidos por la comunidad que beneficiarán a los niños apadrinados, a sus compañeros, a todas sus familias y a toda la población. Normalmente, estas actividades están relacionadas con la educación de calidad, la salud, la nutrición y el agua potable.
En el fondo, el apadrinamiento de niños es una herramienta de creación de relaciones. La comunidad, la organización y los padrinos tienen oportunidades de crecimiento al unirse en la lucha por identificar y tratar los efectos y las causas más profundas de la pobreza.
World Vision no está formalmente afiliada a ningún gobierno, denominación, fundación o corporación, aunque mantiene relaciones de trabajo positivas con todos ellos. Debido a este estatus independiente, World Vision cumple con la definición estándar de una organización no gubernamental.
Con esta consigna, lanzamos un llamado para detener dicho fenómeno que actualmente afecta a millones de niñas y niños. Se trata de un movimiento de alcance global que busca unir las acciones de todos los sectores del país para lograr un mayor impacto con resultados duraderos en el bienestar de la niñez.
En cada guatemalteco está la capacidad de iniciar el cambio a favor de la niñez, podemos iniciar en el seno de nuestros hogares, escuelas y comunidades.